photoshop y fluorescencia...

Dicen ellos, los científicos surcoreanos, que este hecho ayudará al estudio y tratamiento de enfermedades genéticas; pues que bien, (éste, pues que bien, con un cierto tono de escepticismo), pues aunque no dudo de la buena voluntad de la mayoría de los científicos, otra cosa muy diferente es el uso que otras personas, entidades o estados puedan hacer de ello (a un sinfín de hechos podríamos remitirnos). Entre todos esos supuestos, más o menos graves, hay uno en concreto que a más corto término y a un nivel más social y menos secretista, de bien seguro que tendría una gran repercusión, sobre todo para los bolsillos de algunos; imaginaros el próximo cumpleaños de cientos, miles de niños, pidiendo a sus papaïtos, un gatito fluorescente, la leche... seguro que más de uno ya hace rato que se debe de estar frotando las manos...
Pues bien, yo con menos tiempo también he conseguido lo mismo, más o menos.
Qué necesitamos, pues primero el gato, en este caso, nuestra gatita Bastet, segundo una foto suya, y tercero, como no, photoshop, y... tachinnnn!,

VOILA...

... así que papás y demás familiares, si vuestros peques, llegado el caso, os sugirieran el hecho de comprar uno, sencillo, la foto, más barato y así no puteamos más a los pobre bichos, que ya está bien...