viernes, 5 de octubre de 2007

...ÍCARO, SOBRE EL CONSUMISMO

...llegué a soñar que era verdad...





...Ícaro, hijo de Dédalo, en su misión de escapar del laberinto del minotauro, se dejó deslumbrar por la belleza del sol, y no contento de poseer aquel hermoso segundo, deseo tocarlo. Fue así que la cera que unía sus alas al cuerpo se derritió y todo él en el mar desapareció...
Será que el hombre, deslumbrado por esa aparente felicidad que da esta sociedad de consumo, se olvidara de todas aquellas otras cualidades que posee y morirá olvidado en la más oscura noche del tiempo...

Estas imágenes forman parte de mi última exposición, celebrada en Andorra en la sala Torrellardona, dentro del certamen Circuit Art, que este año tocaba el tema de la fotografía.

Ícaro es una colección de 15 fotos de un único tiraje y montadas sobre aluminio, que pretende concienciar a la gente, que de seguir así, esta sociedad que vive obsesionada por el consumo no tiene futuro, y si lo hay será frío y oscuro, y que la felicidad es un estado interno que nos ayuda a afrontar la vida con optimismo y a superar las pequeñas y grandes vicisitudes de la vida...



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